lunes, 11 de diciembre de 2017

Humedal accesible, que sobrevive a la megalópolis de Barcelona, El Delta del llobregat




El pasado mes de Noviembre visité la ciudad de Barcelona para asistir al XIII Foro Internacional de Conservación de la Naturaleza del Comité Español de la Unión internacional para la conservación de la naturaleza (CeUICN). Aprovechando el viaje, me puse en contacto con el personal que vela por la conservación y gestión del espacio natural del Delta del Llobregat, el Consorci per a la Protección i Gestió dels Espais Naturals del Delta del Llobregat, en cuya web se puede localizar toda la información sobre este paraje que sobrevive pese a las circunstancias.


El Delta del Llobregat es un espacio natural protegido que lucha por su conservación desde el año 1987, en que una parte de las zonas húmedas del delta fueron protegidas bajo la figura de la Reserva Natural Parcial del Remolar-Filipines i de la Ricarda-Ca l´Arana hasta  la actualidad, que sigue en proceso de trámite dentro del Pla Especial de Protecció del Medi Natural i del Paisatge del Delta del Llobregat, además se está recopilando información para incluir su superficie en  el convenio Ramsar. Si duda una larga batalla para proteger un humedal, que sobrevive a la presión de una megalópolis como es Barcelona y el área metropolitana y al aeropuerto del Prat, que lo divide en dos, y también al puerto de Barcelona, con su ampliación. Pese a la gran presión a la que el humedal está sometido se han censado 349 especies de aves diferentes a lo largo de su historia, no siempre se observara ese número de especies, pero anualmente descansan en sus aguas y unas 245 aves fácilmente observables desde sus hides o con una paseo por sus pistas.




El humedal está ubicado en un punto estratégico para la migración de las aves, dentro de la ruta migratoria del mediterráneo occidental que une Europa con África. Su importancia para la fauna no solo destaca por las aves, también se ha censado la rata de agua (Arvicola sapidus) y la comadreja (Mustela nivalis), así como varias especies de murciélagos y la tortuga de rió, pese a la gran presión que ejercen especies invasoras.




Al observar el mapa de la imagen uno se puede hacer una idea de la presión a la que los habitantes de este espacio natural están sometidos, con un aeropuerto internacional como es el Prat por un lado y por el otro el puerto de Barcelona, transito de aviones, barcos, camiones de gran tonelaje, que someten a las especies animales a un elevado estrés sonoro y lumínico, es increíble su riqueza en biodiversidad casi un milagro que solo la naturaleza sabe hacer.





Las personas con movilidad reducida también podemos disfrutar de este pequeño oasis en la ciudad condal. Es recomendable avisar con anterioridad a los trabajadores del parque así es posible que dejen acceder hasta el centro de visitantes con el vehículo. Una vez allí se puede realizar un itinerario circular por una pista de tierra batida, que suele estar en buen estado, pero como todas las pistas, después de lluvias tendrá charcos, resaltes y rehundidos, mejor no utilizarla después de lluvias.






Para la observación de aves el recorrido es maravilloso, ya que transcurre en el margen de una de las lagunas permanentes que dispone el humedal. En mi visita además de numerosas paseriformes, avistamos algunas rarezas como la Barnacla cariblanca (Brantal eucopsis) y otras especies de anátidas como el Tarro blanco (Tadorna tadorna), el ánade friso (Anas strepera) o el Porrón común (Aythya ferina), ha destacar el avistamiento de una grulla (Grus grus), que supusimos que estaba descansando para continuar su viaje a la laguna de Gallocanta en Aragón o a Extremadura, en cualquier caso fue muy sorprendente verla tan cerca de la playa, en resumen una mañana pajarera muy agradable y con la inmejorable compañía de Ferrán López, todo un experto del birdwatching.

Una nueva opción accesible de birdwatching en las inmediaciones de una gran ciudad, Barcelona.

Salud, naturaleza y felices fiestas navideñas, seguimos rodando en 2018

jueves, 26 de octubre de 2017

Accesibilidad Universal al Patrimonio. Congreso, Lisboa


Monasterio de Bathala

"Lisboa, sabes"
Eu sei. É uma rapariga
decalÇa e leve,
um vento súbito e claro
nos cabelos,
algumas rugas finas 
a espreitar-lhe os olhos
a solidao aberta
nos lábios e nos dedos,
descendo degraus
e degraus e degraus até ao rio.
Eu sei. E tu, sabias?

Eugénio de Andrade, 
in Até Amanha, 1956



El pasado 2,3 y 4 de octubre asistí como participante y ponente al 4º Congreso Internacional de educación y accesibilidad en museos y al patrimonio, celebrado en Lisboa, Portugal. 

Azulejos pintados en la ciudad de Lisboa
Me habría encantado haber podido hacer el viaje en avión pero me fue imposible viajar con las aerolíneas que operaban la ruta que yo necesitaba, en vuelo directo. Con Aireuropa el problema fue que mi silla al no ser plegable no cabia en la bodega del avión y con la aerolínea portuguesa TAP, el problema era la batería de mi smartpara, que pese a que cumple con la normativa existente, la aerolínea me comunico que ni baterías, ni perro guía, ni nada. 
Lejos de resignarme a no ir al congreso, me lancé a la carretera e hice el viaje en coche, en compañía de mi familia y se convirtió en unas vacaciones en octubre. 

El viaje por carretera es agotador pero cruzar la península de este a oeste, tiene su recompensa paisajística y gastronómica. Una vez en la meseta castellana tras dejar los infinitos campos de cultivo cerealícolas, nos adentramos en sierra morena, montañas, rapaces y el paisaje de encinares adehesados, territorio de lince ibérico. Una vez en la comunidad extremeña, lo que más me impresionó y que no conocía fue atravesar el plan Badajoz. 


Este proyecto se inició en 1952 para dotar de infraestructuras hídricas, eléctricas, de transformación y comercialización agraria apoyadas en la capacidad hídrica del río Guadiana. Convirtiendo a Badajoz en la segunda productora de arroz de España. Será defecto profesional, pero para mí es una verdadera gozada viajar en carretera disfrutando del paisaje agrario, de su evolución estacional. 

"Conocer para aprender, aprender para amar, amar para proteger"

El domingo tras casi 12 horas de viaje, entre las merecidas paradas de descanso y el tiempo empleado en carretera, llegamos a Lisboa deseosos de meternos en la cama para descansar.

Apertura del 4º congreso internacional
 de accesibilidad al patrimonio



El lunes por la mañana Don Álvaro Laborinho Lúcio, jurista y ex ministro de justicia en el año 1990 durante el gobierno de Cabaco Silva, entre otros muchos cargos en la república portuguesa y autor de varios libros A Justiça e os Justos, Palácio da Justiça e Educação, Arte e Cidadania e dos romances O Chamador (2014) e O Homem que Escrevia Azulejos (2016), hacia la conferencia de apertura del congreso. 



“Solo desde la formación se puede alcanzar el pensamiento crítico”. 

En el marco del congreso además de las sesiones de exposiciones orales se  realizaron diferentes al patrimonio cultural y al natural, además de disfrutar de la preciosa ciudad de la desembocadura del Tajo.
Maravillosa ciudad, encantadores sus habitantes, pero muy incómoda para los usuarios de silla de ruedas, aun tienen mucho trabajo que hacer en materia de accesibilidad, como rebajar las aceras en los pasos de peatones, mejorar los pavimentos de las mismas, algo que parece bastante complicado por el carácter histórico de la ciudad, el acceso a la mayoría de edificios, cafeterías, tiendas, pero solo por disfrutar de la gastronomía y de sus maravillosas fachadas de vistosos azulejos de colores y dibujos, vale la pena la visita.


Fachada típica de azulejo pintado en el centro histórico de la ciudad de Lisboa

El segundo día de congreso se dedico a realizar las visitas al patrimonio, estas se centraron en el Concelho de Batalha.
La villa de Batalha pertenece al distrito de Leiria, en la región del centro de Portugal. Fue fundada por el rey Joao Ise edificó como agradecimiento por la victoria de la batalla de Aljubarrota en que los portugueses se impusieron a los castellanos. el 14 de agosto de 1385, sin duda lo más llamativo de la villa.


Vista general del Monasterio de Bathala


Inicio ruta eco parque sensorial
da Pia do Urso 
Mapa Ruta eco parque sensorial
 da Pia do Urso
Una pequeña muestra del patrimonio natural del país, la conocimos con la visita al Eco Parque Sensorial da Pia do Urso. La historia de este lugar es muy interesante por la involucración directa de los lugareños en la adecuación del entorno urbano, bajo las directrices de las necesidades de las personas con diversidad sensorial. Se adecuaron las calles y el entorno a este colectivo, generando itinerarios desde el núcleo urbano hasta el entorno natural, gracias una ruta de fácil acceso, mediante señalética en relieve y colores contrastados en las calles que dirige al usuario invidente con bastón. La señalética se ha realizado con materiales que se mimetizan perfectamente con el paisaje, como el pavimento de las calles con restos de poda.


Señaletica itinerarios eco parque
 sensorial  da Pia do Urso

Por desgracia los itinerarios no son accesibles para usuarios de silla de ruedas debido al desnivel del lugar que ha provocado la necesaria colocación de algunos escalones para salvar dichos desniveles, por lo que no puede conocer el itinerario al completo y disfrutar de los alcornoques que se veían y el sotobosque que los acompaña.





Son varias las rutas de montañas que se pueden realizar en la región tanto a pie como en BBTT y también disponen de varias vías para escalar, me habría encantado tener más tiempo para poder realizar alguna, pero el congreso estaba muy bien organizado y eran muchas las actividades a realizar en el mismo día y no dispuse de tiempo extra para escaparme por el monte, lo dejo para otra visita.

Alcornoques eco parque sensorial  da Pia do Urso


Tras el paseo por la naturaleza visitamos el Museo da Comunidad de Concelhia da Batalha. Lo llamativo del museo es que los objetos que allí se exponen son cedidos por la población, como maquinaria de labranza, aperos de uso forestal y otros útiles que enseñan cómo era la vida de las gentes en aquella región rural. Por supuesto el espacio es completamente accesible y utilizable por todos los visitantes, sea cual sea su diversidad funcional, sensorial, psíquica.





Por último nos trasladamos al Convento de Santa María da Victoria, también conocido como el Monasterio de Batalha. Es un claro y monumental ejemplo del gótico tardío de Portugal que está mezclado con el estilo manuelino, con alguna zona inacabada que le da un aire bucólico e impresionante. Sus claustros, sus interiores, los detalles cincelados en piedra en sus arcos, que dan paso al claustro son dignos de admirar. Una obra que durante dos siglos debió de reunir a los mejores maestros albañiles para su construcción y que desde su finalización en 1517 hasta el día de hoy se encuentra en perfecto estado y todos los visitantes pueden acceder. Vale la pena indagar en la historia de su construcción por la que pasaron diferentes arquitectos provenientes de varias zonas de la península, que han dejado patente por los diferentes matices estilísticos. 





Claustro Monasterio Bathala

Como lo mío es la naturaleza y tengo debilidad por lo árboles para mí fue el claustro el elemento que más llamó mi atención con sus grandes cipreses acercando el cielo a la tierra y el artesonado con motivos vegetales de los arcos de medio punto que dan acceso al mismo.




Después del merecido almuerzo, tras la intensa mañana de visitas se aprovechó la tarde para disfrutar de más ponencias en la Cámara municipal de Batalha. La mesa temática tenia por título “Investigación académica y práctica profesional: romper barreras y crear puentes” y se constituyo por varios ponentes y la moderadora de la mesa. Los ponentes con los que tuve el placer de compartir la tarde fueron Virginia Gomes, del museo nacional de machado de castro y Celia Sousa del instituto politécnico de Leiria y Santiago González con Ester de Frutos del Museo Nacional del Prado. 
Desde la Universitat Politècnica de Valencia se presentó el trabajo de investigación, dentro del programa de doctorado en infraestructuras de transporte y territorio sobre “La información en las webs oficiales de los Parques Nacionales de la Península Ibérica. Cómo y sobre qué informar, para garantizar los estándares de Accesibilidad Universal”, en el marco de la estrategia europea 2010-2020.

 Hacia una Europa sin barreras”

Ponencia de comunicación científica de la UPV en 4º Congreso Internacional accesibilidad al patrimonio, Lisboa


El 4 de octubre finalizó el congreso con la conferencia de clausura a cargo de Hugues de Varine, museólogo, que nos hablo sobre O Acceso de Todos ao Bem Comum: o caso do Patrimonio y con el debate final y las conclusiones.
El 5 por la mañana inicié el viaje de vuelta, en coche y pasando por Mérida, fue inevitable no hacer una parada y conocer el conjunto arquitectónico de la época romana dorada que tuvo este enclave de la península dentro del imperio romano. Pero esto lo dejo para la próxima entrada.

Muito obrigada, Lisboa

Enlaces de interés:
https://www.facebook.com/conintedac/
https://www.museodelprado.es/aprende
http://www.vercoimbra.com/museo-nacional-de-machado-de-castro-de-coimbra.html
http://www.museubatalha.com/
http://www.vilamuseu.es/accesibilidad

martes, 19 de septiembre de 2017

Turismo de naturaleza, insano para la naturaleza. Niagara falls


El amor a la naturaleza virgen
no es solo un anhelo de lo que es inalcanzable;
es una expresión de lealtad a la tierra,
la tierra que nos sustenta y sostiene,
el único hogar que conoceremos,
el único paraíso que siempre necesitaremos...
El pecado original, es la destrucción ciega,
 en pro de la codicia de este paraíso natural,
que se extiende a nuestro alrededor,
ojala fuésemos dignos de él.

Edwar Abbey, 
El solitario el desierto


El verano llega a su fin para dar la entrada al otoño, estación de renovación, de reflexión, de calma. Los árboles en breve se vestirán de tonos rojizos, dejando caer sus hojas viejas para iniciar un periodo de pausa tras el que la vida aflorará nuevamente en la próxima primavera. Para nosotros, tras la época estival, nos llega el momento de volver a la rutina, retomar obligaciones, relajarnos y reflexionar, para dar paso al invierno, epoca de recogimiento que extasiará también la próxima primavera. 

Hace unos días leí un artículo que ponía de manifiesto la lacra consumista que también se había apoderado de nuestro tiempo de descanso, las vacaciones estivales, en las que se nos arrastra a seguir devorando productos y servicios en pro de la mejora de la economia. 
Ciudades patrimonio tomadas por hordas de turistas, comercios locales transformados en franquicias que nada tienen que ver con las tradiciones locales.  Turistas adrenalíticos, hambrientos de emociones fuertes, que pretenden vivir en lo rural como si de una gran ciudad se tratase, donde las vacas y sus moñigas molestan porque huelen y atraen a las moscas. Espacios naturales acondicionados con la tecnologia del siglo XXI, para que las personas que acuden al campo no se manchen el equipo de camuflage, adquirido para la ocasión en grandes superficies del extrarradio de las ciudades.


El turismo de naturaleza esta de moda, y no me extraña, el aire de las ciudades se ha vuelto irrespirable, el estres se ha apoderado de nuestro modo de vida, el descanso se ha convertido en un lujo del que solo disfrutan algunas zonas VIP en las ciudades, por lo que escaparse de la "city" en vacaciones, casi que se ha convertido una cuestión de salud pública, para que el cuerpo humano resista un nuevo año más de atascos, prisas, desesperación, largas jornadas de trabajo y conciliación familiar.


El turismo verde o rural se planteó y se ha fomentado, como una solución muy positiva para reducir  el despoblamiento y el abandono de las zonas rurales, una estrategia para preservar y conservar los espacios naturales.

Recuerdo aquellos años en los que llegaba el mes de agosto y España casi que se paralizaba, para que los españoles regresáramos al pueblo, ese lugar donde abuelos nos esperaban con los brazos abiertos y las ollas puestas al fuego desde las 8:00 de la mañana, para deleitarnos con un buen guiso cocinado con productos locales, que habían sido transportados en canastos sobre la drupa de la mula o el burro. ¡Que tiempos aquellos! y ¡que tiempos estos que estamos viviendo! o mejor dicho malviviendo.
La sociedad del siglo XXI  tiene otros hábitos, que no congenian bien, con la conservación del medio ambiente, del paisaje y del paisanaje. En esta era se considera importante conservar aquello que es rentable económicamente y lo que no, simplemente se abandona. Tras el abandono y la desaparición de los usos tradicionales del campo, aparecen los incendios forestales agravando más la situación de la comarca y haciendo más inviable la vida rural. 


El problema es, que en este proceso de rentabilidad, todo vale si da dinero y esta política suele ir en contra de la conservación del propio reclamo turístico, un parque natural, un monumento o los pueblos con encanto, por ejemplo.



Durante este verano he visitado la ciudad de Toronto, en Canadá, donde he conocido un claro ejemplo del todo no vale, aunque sea rentable y accesible, en los espacios naturales. 
Las Cataratas del Niágara han sido protagonistas en películas, y no me extraña que la gran pantalla se interesara por este paisaje,  espectáculo de la naturaleza en el que litros y litros de agua se precipitan al unísono, produciendo un estruendo  al chocar con el lecho rocoso, para seguir su curso camino del océano y formar parte así del ciclo hidrológico.


Las Cataratas del Niágara situadas entre el estado de Nueva York en EEUU y Ontario en Canadá, son las únicas en Norte América. El rio Niágara divide dos naciones EEUU y Canadá y curiosamente así queda patente por los uniformes de los turistas en la visita a sus entrañas, los que acuden al lugar desde el margen Canadiense lucen chubasquero rojo y los del margen Estadounidense chubasquero azul o amarillo.



Mi chubasquero fue rojo y accedí en barco, por el margen estadounidense existe un acceso al corazón de la cascada a través de pasarelas de madera, no puedo opinar e informar de la accesibilidad, ya que la observe desde la distancia y no me atrevo ha juzgar el nivel de accesibilidad. 
Desde el acceso canadiense si puedo afirmar la total accesibilidad de las instalaciones, a través de una estructura se llega hasta el muelle para embarcar. La estructura está compuesta de varias rampas, no excesivamente pronunciadas para descender el desnivel del río. El ticket de acceso incluye el chubasquero rojo ya que como descubrí después, el objetivo no es otro que el capitán acerque el barco a la cascada y así te mojas, haciendo las delicias de mayores y pequeños y como no un plano perfecto para tener tu "selfie" y compartir en redes sociales.


Mi experiencia no fue ni agradable ni satisfactoria, creo que todavía sigo enfadada con el mundo, jamás he visitado un espacio natural en el que se hayan cometido tantas barbaridades y no porque el proceso natural en si no sea espectacular, que lo es, sino por la capacidad destructiva del ser humano cuya causa no es otra que el estilo de vida consumista, donde todo vale si es económicamente rentable.

La naturaleza tiene una capacidad de acogida limitada que cuando se supera, puede provocar que los procesos naturales, que hacen que la zona sea especial y deseada por el ser humano, por su belleza y singularidad, se vean afectados de forma negativa degradándose el lugar y por lo tanto el propio reclamo turístico, lo cual es un sinsentido incluso según criterios económicos. 


Finalizo esta entrada con una galería de imágenes de lo que fue mi acceso hasta el barco, en el que no escuché a las aves y a duras penas al propio río, espumoso y con demasiado tinte verde, donde los cormoranes no podían estar tranquilos con el ir y venir de los barcos. 
Tras una larga cola se accede y se inicia el descenso por un túnel, por el que diariamente circulan miles de personas, tantas como caben en los barcos,  que cada 10-20 minutos descargan y cargan nuevos pasajeros. Paseo de hormigón con televisores cada 20 metros para que no pierdas detalle de la liga de beisbol, rugby, etc… y altavoces con la canción del verano. Antes de llegar al muelle sala de photocall para inmortalizar el momento, salida al exterior reparto de chubasquero rojo y acceso al barco, no puedo afirmar cuantas personas entramos, solo se que estaba rodeada de gente. A los 20 minutos aproximadamente estas otra vez en tierra, mojados y felices deseosos de subir a RRSS la selfie para que el universo se entere que has estado allí. 
Se regresa por otro itinerario atravesando heladerías y tienda de souvenir, es muy agobiante y para los rodantes especialmente, por el poco espacio para circular, se ha aprovechado hasta el último rincón.  Al llegar arriba, si no has comprado nada, tranquilo dispones de una ciudad de consumo a escasos metros repleta de todo tipo de tiendas, restaurantes, heladerías, maquinas y si te sientes muy afortunado, este es tu lugar!, hay tantos casinos que no dispondrás de tiempo suficiente para visitarlos todos, ¡good luck amigos!. Si os parece exagerada mi impresión, tenéis el enlace oficial, juzgar por vosotros mismos: 




¡Aviso!, las imágenes pueden herir la sensibilidad de las personas concienciadas con la conservación y preservación de la naturaleza.















Salud y naturaleza y sobretodo cordura, el campo es el campo y para todo lo demás están las ciudades, si no puedes renunciar a sus comodidades, no salgas de ellas, la naturaleza te lo agradecerá.

miércoles, 21 de junio de 2017

Playas, accesibilidad universal es posible, Menorca


(...) Y a mi enterradme sin duelo 
entre la playa y el cielo...
En la ladera de un monte,
más alto que el horizonte.
Quiero tener buena vista.
Mi cuerpo será camino,
le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista...
Cerca del mar. Porque yo 
nací en el Mediterráneo.

Mediterráneo por
Joan Manuel Serrat de
 Antonio Machado



Hoy oficialmente empieza el verano, pese a que desde hace unos días estamos sufriendo una ola de calor más propia del mes de julio, que de la época en la que estamos, otra vez batimos records y aún existen personas negacionistas del cambio climático. 
La necesidad de refrescarnos son obvias para todos y más las personas que tenemos una lesión medular, porque solemos tener la mayoría, problemas para regular bien la temperatura, y es que el "termostato se nos ha averiado" ya que parece ser que también está ubicado en la médula espinal, disculpen por la falta de rigor en la nomenclatura. 


A partir de este mes las playas, ríos, embalses y piscinas son un reclamo social, ya que cuando las temperaturas superan el umbral del confort, establecido en los 25º C, las sombras y zonas de agua, son es el mejor refugio para sobrellevar las altas temperaturas. 
Pero, ¿puede acceder cualquier persona, familia, grupo de amigos, etc...al agua "fresquita"?, por desgracia no, la realidad es que un 10% de la población europea con discapacidad reconocida, encuentran problemas para refrescarse en playas, ríos, piscinas y zonas de baño públicas en general.Un hecho que nos condena a vivir los veranos con la agonia de no poder saborear las mieles del mar o de otros lugares de ocio en el agua.

Afortunadamente y gracias a la promulgación de la Estrategia Europea 2010-2020 "Un compromiso renovado hacia una Europa sin barreras" (EE2020) y las normativas que cada Comunidad Autónoma va promulgando, en materia de diversidad funcional, este hecho discriminatorio de falta de accesibilidad en lugares de ocio de agua, se esta solucionando, hacia un uso inclusivo de los espacios públicos, aplicando normas, de diseño para todos.


España, un país bañado por el mar Mediterráneo, el mar Cantábrico y el océano Atlántico ha conseguido que en 2017 un total de 579 playas obtengan el galardón de bandera azul, según lo que publicó el 9 de mayo el Mundo, concesión que otorga la Fundación Europea de la Educación Ambiental (FEEA), que indica excepcionalidad de calidad del agua, gestión ambiental del entorno, seguridad e información. Pese  al gran número de playas con esta bandera, solo el 15, 9 % de playas son accesibles, según publicó el 20 de junio, 20 minutos. Andalucía encabeza la lista con el 27% de playas accesibles, seguida de la Comunidad Valenciana, Murcia y País Vasco. Un porcentaje de accesibilidad lejos de cumplir con la política de inclusividad que requiere la Unión Europea, promulgados en la EE2020.
Aunque en este ranking no aparecen datos de las Islas Baleares, os voy a describir mi experiencia en las playas de Menorca como usuaria de silla de ruedas que soy.



Os presento la playa de Binibeca Nou (Binibequer), en la que la conservación de la naturaleza, protección del paisaje y la accesibilidad se han fusionado, para ofrecer una experiencia maravillosa en una cala paradisíaca, de aguas azul turquesa y blanca arena, dotada de los equipamientos necesarios, para que cualquier persona pueda disfrutar de una jornada playera para soportar los efectos de esta ola de calor.



La playa familiar de Binibeca Nou, que pertenece a la villa con su mismo nombre, Binibeca Nou, se ubica cerca del centro urbano de pueblo, por lo que se considera una playa familiar que reúne prácticamente todos los requisitos necesarios, para que una persona con movilidad reducida, pueda pasar una jornada playera de forma independiente. 


Acompañada de Carla Gil, responsable del Área de Juventut de la Oficina de Turisme del municipio de Es Castell, hicimos una ruta para evaluar, según los requisitos que publica el Real Patronato de la discapacidad, algunas de las playas que aparecen como accesibles en la web oficial de turismo de Menorca.


La evaluación de la playa de Binibeca Nou, según criterios de accesibilidad para personas con movilidad reducida, obtuvo una buena puntuación aunque detectamos aspectos que son muy mejorables. A continuación describo las características sobre accesibilidad de la playa y sus alrededores.



El acceso a la playa es relativamente fácil, desde Maó dirección Sant Lluís y desde Ciutadela dirigirse a Maó y dirección Sant Lluis, donde ya encontraremos indicaciones para llegar al pueblo y a la playa.


Existen dos parquings con accesos a la playa, en el primero que veremos no hay plazas para PMR, ni tampoco buen acceso a la playa, seguir hasta el siguiente, donde encontraremos 1 plaza PMR, si seguimos un poco más y tomamos la primera calle a la derecha encontraremos 2 plazas más, justo donde está el acceso a la playa que es accesible.





El acceso es por un camino de cemento blanco, que se mimetiza perfectamente en el paisaje de bosque mediterráneo que nos acompañará hasta alcanzar la arena de la playa. 

Se encuentra en buen estado, el ancho es adecuado para la silla de ruedas, la pendiente está entre el 8 -10 %, se han contemplado zonas de cruce de silla de ruedas cada 5 m. aproximadamente, pero no se han dejado cada 12 m. zonas de descanso, lo que supone un problema a la bajada y sobretodo para la subida, porque hay que hacer todo el desnivel a la vez, detalle muy importante para asegurar un diseño inclusivo y útil para todos. 


Al alcanzar la arena el cemento se ha sustituido por entarimado desmontable, está en muy buen estado y alcanza hasta los 3 - 4m. de la propia orilla del mar.




La zona de sombra, se ha ubicado en una pinada próxima con mesas y bancos, e aquí una de las primeras carencias, no han contemplado un acceso a este lugar para silla de ruedas, fácilmente solucionable con un entarimado para que podamos circular a ese lugar sin hundirnos en la arena. 




Justo antes está el puesto de vigilancia de los socorristas, que sí dispone de una rampa para acceder, de pendiente fuera de la norma, aunque no podemos llegar porque no hay tarima. Esto no fue un problema para mi ya que los socorristas, como no puede ser de otra manera, están muy pendientes de la vigilancia, y enseguida me vieron y se aproximaron para que les explicara mis necesidades y ofrecerme su ayuda y material disponible.

¿Necesidades? un refrescante baño en esas aguas cristalinas

¡silla anfibia, ayuda para transferirme y al agua!.


Los primeros metros de playa la profundidad es de poco más de medio metro, por lo que permanecer sin ayuda me resulto fácil y pude disfrutar de todo el tiempo que quise en las azules aguas del Mediterráneo. Eso sí, la silla anfibia la podemos utilizar durante la jornada laboral de los socorristas, que terminan a las 18:30. A partir de esa hora nos podemos ir al chiringuito que hay junto a la cala, con unas vistas maravillosas tanto de la playa como del faro de l´Illa de l´Aire (faro de la isla del aire) y relajarnos. 

Dispone de un baño accesible, que esta junto al chiringuito, e aquí el otro gran "pero" de la accesibilidad a los equipamientos, la rampa de acceso supera con creces el 8 % recomendable para que sea accesible, se requerirá ayuda para subir y para bajar.
Espero que disfrutéis de los maravillosos paisajes menorquinos fotografiados. También deseo y reivindico que poco a poco sean más las playas, que se sumen a mejorar su accesibilidad, para colgar la bandera de playa accesible o mejor dicho, playa inclusiva, junto a la bandera azul. La legislación está desarrollada, solo hace falta voluntad política para aplicar la ley y construir un mundo agradable a todas las personas. 



Salud, naturaleza y baños refrescantes para todos, ¡feliz entrada al verano!

Palabras clave: 
Estrategia Europea 2010-2020, playas accesibles, diversidad funcional, diseño para todos, inclusividad.

Agradecimientos:
Rodem movilidad
Carla Gil, área de joventut, oficina de turisme de Es Castell
Socorristas de la playa de Binibeca

Enlaces de interés
Real Patronato de la discapacidad: http://www.rpd.es/
Turismo de Menorca, payas accesibles: https://menorcadiferente.com/playas-accesibles-con-movilidad-reducida/
EUR-Lex: http://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=CELEX%3A52010DC0636