Os voy a hablar de la experiencia del pasado domingo organizada
por SEO Birdlife y Acció Ecologista Agró al Tancat de la Pipa, con motivo de la celebración el 2 de
Febrero, del día mundial de los humedales. http://www.accioecologista-agro.org/
Hasta 1911 la Albufera y su gestión perteneció a la realeza. Siglos atrás, Carlos III levantó la prohibición de cultivar arroz en humedales y a raíz de ahí los campos fueron ganando espacio al lago con sucesivos aterramientos. Un "tancat" es un
espacio dentro de la Albufera que se cerraba para poder cultivar arroz.
Los arrozales se encuentran por debajo del nivel de la laguna y se cierran/delimitan gracias a motas de tierra también conocidos como “caballó" o "marge".Los
campos se inundan de agua por gravedad a la plantación y vaciándose para la recolección. La extracción de agua se produce gracias a los motores que dan servicio a un grupo de campos de cultivo.
En el edificio del motor, ubicados en islas de tierra en el lago, se habilitaba una vivienda de una o dos plantas, en las cuáles vivían familias que se encargaban de la gestión del agua manteniendo los niveles según las necesidades de cultivo. Estas familias vivían aisladas y se desplazaban a lo largo de la albufera con barcas construidas en la zona y típicas del lugar y precisamente en una de estas barcas nos desplazamos para poder llegar al Tancat de la Pipa.
Así que sobre las 10:00h estábamos esperando en el puerto de Catarroja. El puerto dispone de pasarelas desde donde se puede observar el paraje y amarres para las barcas, es un bucólico lugar donde pasar una mañana de paseo, observar y escuchar las aves.
Para acceder a la
barca existen rampas para que los usuarios de silla de ruedas podamos bajar al
embarcadero y entre Nelo y su compañero Boro me subieron a la
barca. Iniciamos la ruta surcando la rambla de Catarroja hasta el lago. Durante
el paseo pudimos disfrutar de la observación de diferentes aves acuáticas como
La garza real (Ardea cinérea) garza imperial
(Ardea pupurea), garceta común (Egretta garzetta) y el Aguilucho
lagunero (Circus aeruginosus)
Llegamos al Tancat de la Pipa, que conserva su embarcadero, edificio y el motor original. Ya en el
recinto, plenamente adaptado, disfrutamos del anillamiento donde el pequeño mosquitero
común (Phylloscopus collybita) se dejó acariciar por todos. http://www.tancatdelapipa.net
La jornada continuó con un paseo por el parque hasta el hide adaptado, desde donde se observa una de las lagunas. El observatorio, al igual que el camino, están adaptados y pude disfrutar de una de mis grandes pasiones, la ornitología. Mientras hacíamos la ruta, Mario, nos explicaba la importancia de cada laguna y el funcionamiento de los biofiltros para la calidad del agua.
Finalizamos con un aperitivo a cargo del restaurante Ca Mateu, que también quiso contribuir al día de los humedales. Experiencia que recomiendo a todo tipo de familia sea cual sea su diversidad ya
que el espacio está totalmente adaptado y es un lugar perfecto para iniciarse en la observación de aves y descubrir la Albufera.
Recomiendo encarecidamente la lectura de Cañas y barro, de Vicente Blasco Ibáñez para saber más sobre la sociedad, la vida y costumbres en este humedal valenciano a finales del sXIX.
!Esperamos que os haya gustado! Sí es así, !Apuntaros al blog!